Desmintiendo los Mitos Más Comunes Sobre la Ley de Lesiones Personales en Nueva York

Si tú o alguien cercano resultó lesionado en la ciudad de Nueva York, es probable que hayas escuchado versiones contradictorias sobre qué esperar del proceso legal. Los malentendidos sobre la ley de lesiones personales en Nueva York suelen desalentar a las personas de buscar justicia o retrasan la presentación de un reclamo. En este artículo, desmentiremos los mitos más comunes, separaremos los hechos de la ficción y te ayudaremos a comprender tus derechos bajo la ley de Nueva York con la orientación de Cohan Law Firm.

Mito #1: “Si tengo parte de la culpa, no puedo recibir compensación”

Hecho:
Nueva York sigue la regla de negligencia comparativa pura. Esto significa que puedes recibir una compensación incluso si fuiste parcialmente responsable del accidente. Tu indemnización simplemente se reducirá según tu porcentaje de culpa. Por ejemplo, si tuviste un 30% de culpa en un accidente de auto, aún podrías recuperar el 70% de tus daños.

Muchas personas creen erróneamente que cualquier grado de responsabilidad anula su reclamo. Sin embargo, este es uno de los mitos más frecuentes con los que los abogados de lesiones personales en Nueva York lidian a diario.

Mito #2: “Las demandas por lesiones personales siempre tardan años en resolverse”

Hecho:
Aunque algunos casos complejos pueden tomar más tiempo, muchos reclamos por lesiones personales en Nueva York se resuelven en cuestión de meses. El tiempo depende de la gravedad de las lesiones, las negociaciones con el seguro y la programación judicial. Con el apoyo de Cohan Law Firm, el proceso puede ser más ágil y avanzar hacia una resolución sin demoras innecesarias.

Mito #3: “No puedo pagar un abogado de lesiones personales”

Hecho:
La mayoría de los abogados de lesiones personales en Nueva York, incluido Cohan Law Firm, trabajan bajo un honorario de contingencia. Esto significa que no pagas nada por adelantado y solo se cobran honorarios si el caso se gana. Así, el acceso a la justicia no depende de tu situación económica.

Nadie debería dejar que el miedo financiero le impida reclamar una compensación justa.

Mito #4: “No me lastimé gravemente, así que no tengo un caso”

Hecho:
Algunas lesiones, como los daños en tejidos blandos o las conmociones cerebrales, pueden no mostrar síntomas inmediatos. Incluso los accidentes menores pueden generar facturas médicas elevadas o pérdida de ingresos. Es fundamental buscar atención médica y asesoría legal antes de descartar tus derechos.

Los mitos sobre lesiones personales en Nueva York a menudo llevan a las personas a subestimar el impacto a largo plazo de lesiones aparentemente leves.

Mito #5: “El seguro cubrirá todo, así que no necesito un abogado”

Hecho:
Las compañías de seguros suelen intentar minimizar los pagos. Sin representación legal, podrías aceptar un acuerdo que no cubra completamente tus daños. Un abogado de Cohan Law Firm puede evaluar si la oferta es justa y negociar un resultado más favorable.

Desconocer esto pone a las víctimas en riesgo de aceptar compensaciones inadecuadas, razón por la cual es tan importante desmentir los mitos sobre la ley de lesiones personales en Nueva York.

Mito #6: “Puedo presentar un reclamo en cualquier momento”

Hecho:
En Nueva York existe un plazo de prescripción estricto. En la mayoría de los casos de lesiones personales, tienes tres años desde la fecha del accidente para presentar un reclamo. Si dejas pasar ese tiempo, podrías perder definitivamente tu derecho a recibir compensación.

Aunque hay excepciones, no debes asumir que tienes tiempo ilimitado. Consultar rápidamente con Cohan Law Firm te ayudará a proteger tus derechos.

Mito #7: “Solo cuentan las lesiones físicas”

Hecho:
Los reclamos por lesiones personales también pueden incluir daño emocional, dolor y sufrimiento, pérdida del disfrute de la vida, entre otros. Los tribunales de Nueva York reconocen tanto los daños físicos como los no físicos al determinar la compensación.

Este mito lleva a muchas personas a ignorar aspectos legítimos de su reclamo, subestimando el alcance real de su caso de lesiones personales.

Mito #8: “Tengo que ir a juicio para recibir compensación”

Hecho:
La mayoría de los casos de lesiones personales en Nueva York se resuelven fuera de los tribunales mediante negociaciones. El litigio es el último recurso. Un abogado puede lograr un acuerdo favorable sin necesidad de juicio.

Con el apoyo de Cohan Law Firm, muchas víctimas logran una compensación sin tener que presentarse ante un juez.

Mito #9: “Puedo manejar el caso por mi cuenta con formularios en línea”

Hecho:
Aunque evitar los honorarios legales puede parecer tentador, representarte a ti mismo puede resultar en reclamos infravalorados, errores en los plazos o formularios mal presentados. La ley de lesiones personales es compleja y Nueva York tiene requisitos específicos que deben cumplirse. Contar con un abogado garantiza que cada detalle se maneje correctamente.

Mito #10: “Debo esperar a recuperarme por completo antes de presentar un reclamo”

Hecho:
No necesitas estar completamente recuperado para comenzar el proceso. De hecho, esperar demasiado puede perjudicar tu caso. Los registros médicos tempranos son esenciales, y mientras antes empiece tu abogado a recopilar evidencia, más fuerte será tu reclamo.

Retrasar el proceso puede dar la impresión de que tu lesión no fue grave, uno de los mitos más perjudiciales sobre lesiones personales.

Reflexión Final: Conoce los Hechos Antes de Tomar una Decisión

Entender la verdad detrás de estos mitos sobre la ley de lesiones personales en Nueva York es el primer paso para tomar decisiones informadas sobre tus opciones legales. En Cohan Law Firm, nos aseguramos de que tengas los hechos, el apoyo y la representación que mereces.

Contáctanos para una evaluación gratuita de tu caso en Nueva York, o descarga nuestra lista de verificación gratuita para reclamos de lesiones y determina si podrías tener un caso.

Deja que nuestros abogados con experiencia respondan tus preguntas y te guíen en cada paso del proceso.

Aviso Legal

Este artículo tiene fines informativos únicamente y no constituye asesoría legal. No crea una relación abogado-cliente.